LA CREMA DE PROTECCIÓN SOLAR NO ES UN FILTRO MÁGICO
La primera regla es que no se puede esperar de un producto solar una protección del 100% contra la radiación ultravioleta y los daños causados a la piel. Es imprescindible permanecer en la sombra durante las horas de más calor, utilizar gorra o sombrero y gafas para proteger el rostro y los ojos.
PRINCIPALES ELEMENTOS PARA ELEGIR LA MEJOR PROTECCIÓN SOLAR:
FPS
Expresa el nivel de protección contra la radiación ultravioleta, responsable de erupciones y quemaduras solares. Para evitar confusiones sólo existe una escala a nivel internacional.
Hay cuatro categorías estandarizadas: Protección baja (6 a 10), media (15 a 25), alta (30 a 50), muy alta (más de 50). Debes considerar que por debajo de 15, la protección contra los rayos UV es casi nula.
WATER RESISTANT
Si vamos a la playa o a la alberca, es fundamental que los productos solares sean resistentes al agua y debemos volver a aplicarlos después de bañarse.
ALMACENAMIENTO
Mirar la fecha de caducidad no es suficiente, las cremas solares nunca deben utilizarse después de más de un año de su apertura.
¿CONTRA QUÉ NOS PROTEGEN LAS CREMAS SOLARES?
Los daños causados por los rayos UV incluyen: envejecimiento de la piel, eritema, quemaduras solares, daños oculares y algunas formas de cáncer.
Hay que evitar siempre las quemaduras solares, especialmente en la piel de los niños, que agrava y almacena el daño.
Para los más pequeños se debe evitar la exposición directa al sol, sobre todo entre las once de la mañana y las cuatro de la tarde.