Autor: Lucelly Rosado
Sus grandes ojos verdes y su franca sonrisa que contagia energía, son determinantes en la personalidad que define a Silvina, personaje que en esta ocasión nos comparte su historia y cómo su presencia ha sido factor de cambio en la Mansión del Hotel Desire Pearl.
Originaria de Toronto, Canadá, esta mujer de altura física y mental es hija de padres argentinos, ella nos relata que tuvo una infancia tranquila al lado de su hermana y familia, donde disfrutaba de las visitas a Rosario, Argentina, ahí vacacionaba para convivir con sus primos y su querida abuela. Así, tuvo la oportunidad de conocer la cultura de su papá, y fueron momentos que marcaron su gusto por los viajes.
Parte de los logros que pueden hacer sentir muy orgullosa a Silvina, es el recuerdo de haber representado a Canadá en unos juegos internacionales de basquetbol realizados en Trinidad y Tobago, un reto muy grande para una joven de diecisiete años. Triunfo que ha sido la base en sus acertadas decisiones de vida.
“En algún momento tomé la decisión de salir de mi casa a los veinte años, sola y con rumbo a un país nuevo. Tuve la oportunidad de trabajar con animadores y así fue que me propusieron ir a México”, comenta con orgullo Silvina. De esta manera, nuestra entrevistada llegó a Tampico, Tamaulipas, donde radicó cinco meses y aprendió sobre la cultura mexicana.
“Este lugar me hizo sentir totalmente a México, sus tradiciones, su comida y su música. Me fascina la banda y sé bailar muy bien”, relata emocionada y señala que tuvo la suerte de radicar en Huatulco, Oaxaca, y Puerto Vallarta, Jalisco, hasta que llegó el momento de conocer Cancún, Quintana Roo.
Lograr vivir sola en un país desconocido, fue una meta que Silvina alcanzó por el ejemplo de fortaleza que le dio su mamá, y fue su mejor herramienta: “Cuando desafortunadamente mi papá falleció, mi mamá se convirtió en madre soltera, yo tenía seis años y mi hermana siete; la vi luchar por nosotras, tener varios trabajos y largas jornadas laborales, pero nunca permitió que nos faltara nada. Mi madre es una mujer fuerte e inteligente, que nos enseñó a trabajar por nuestros logros; cuando le dije que viviría en México no me puso obstáculos, al contrario, me dio sus bendiciones, aunque yo sabía que era difícil para ella, definitivamente es la persona que más ha influido en mi vida”.
Para una persona exitosa como Silvina, un día perfecto es aquel que puede disfrutar en la playa rodeada de amigos, jugando voleibol y disfrutando del mar. Y si de comida mexicana se trata, su principal reto fue asumir que en México todo lleva limón, contrario a lo que acostumbran en Canadá, sin embargo ha aprendido a disfrutar de la cocina mexicana, los chilaquiles verdes y tacos al pastor son sus platillos favoritos.
“En estos veinticinco años que llevo en México lo que más aprecio es la calidez del mexicano, aquí llegas y la gente te hace sentir como familia, te encuentras a alguien en el elevador y te saluda, en otros lugares del mundo no te saludan si no te conocen”.
Para quienes conocen a Silvina sería difícil pensar que de pequeña era una niña tímida e introvertida, “de adolescente no me gustaba mi altura, como mujer ser alta era incómodo, pero ahora esa cualidad me encanta, me gusta usar tacones altos. Me hace feliz trabajar en Original Group porque me ha ayudado a ser mejor persona y más profesional, esta compañía ha enriquecido mi personalidad, ahora soy perfeccionista y me planto mejor al hablar en público”.
Silvina considera que una clave para tener éxito, es priorizar los objetivos y aprender de los errores. “Tener un plan claro es vital, al igual que rodear tu entorno de gente inteligente y no hacer caso a las personas negativas. En el trabajo suelo ser directa y práctica, pero en la vida personal soy muy sensible a los detalles”.
Dos libros que han impactado el pensamiento de Silvina son: A Thousand Splendid Suns de Khaled Hosseini, donde el mensaje radica en la persevarancia y esperanza; el segundo libro es The Way of Integrity: Finding the Path to Your True Self de Martha Beck, libro que la dotó de una perspectiva diferente.
“De cómo enfrentar las cosas de la vida y decidir lo que quiero; a mis 45 años nunca es tarde para aprender algo nuevo. Un consejo que doy a todas las mujeres, es no permitir que nadie les diga que no pueden, es importante que las mujeres y las niñas sepan que pueden y deben alcanzar sus metas”, detalla Silvina.
Por último, como experta en viajes nos comparte que de todos los destinos a los que ha viajado, su favorito es la costa de Italia y Roma, por la historia y lo extraordinario de su cultura y el detalle en sus construcciones.
Frase favorita de Silvina:
“Tell me and I forget. Teach me and I remember. Involve me and I learn”.
“Dímelo y lo olvido, enséñame y lo recuerdo, involúcrame y aprendo”.
Si quieres saber más sobre Silvina síguela en redes sociales, puedes encontrarla como Silmod en Tiktok y en Instagram podrás conocer más sobre su personalidad formal y divertida.